Truquiteca: Pan duro como nuevo

 Un truco para ahorrar algo de dinero. Hoy voy a hablar de cómo recuperar el pan duro del día anterior. No está la cosa para tirar nada, mejor aprovechar el siguiente truco.



Necesitas un pulverizador con agua y rocía el pan duro con un poco de agua, o simplemente pásalo rápidamente por debajo del grifo. No es necesario “mojarlo” sólo “humedecerlo” tímidamente.

Después colócalo en el horno, en la parte más alta durante unos 5-10 minutos, verás que después está totalmente crujiente.

Cómo cortar o picar cebollas sin llorar.

Cortar cebollas es un suplicio. Hasta no hace mucho siempre acababa como si hubiera visto la escena de la muerte de la madre de bamby por primera vez. Y es que las cebollas se las traen. Imprescindibles en nuestra cocina, pero autenticas bombas lacrimogenas.


La razón del lagrimeo es la anilasa que contiene la cebolla y causa la irritación de las mucosas nasales al inhalar la molécula propanotial  que se desprende al cortar las capas de la cebolla. Normalmente esta emisión suele tener un radio pequeño de alcance, de unos 50-90 cm aproximadamente.

Para evitar el lagrimeo el mejor truco no es taparse la nariz, es hacer uso de nuestra nevera. Lo unico que necesitamos es dejar nuestras cebollas dentro y esperar a que  estén muy frías. Así el gas es menos volátil y normalmente o no se desprende o se desprende mucho menos.

Basta con meter las cebollas en el congelador durante unos 10 minutos o en la nevera durante una hora antes de cortar.  Y resuelto el problema ;)


Cómo cocinar con el lavavajillas.

Atentos que este truco de cocina mola. Se trata de cocinar con el lavavajillas. Sí, mientras lavamos nuestra loza también podemos cocinar. Se trata de un proceso de coción y es necesario utilizar envases herméticos. Al parecer es bastante seguro y sirve para ahorrarnos tiempo y dinero.

Cómo separar las yemas de la clara de huevo con una botella de plástico

Este es un interesante truco, sirve para ahorrarnos algo de tiempo a la hora de separar las yemas de las claras de huevo.  La verdad es que funciona muy bien, aunque en la práctica siempre acabo usando el método tradicional, porque no siempre tengo acceso a una botella de plástico.


Cómo preparar un buen caldo de pollo

Una receta muy sencilla, no hay que ser un cocinillas para preparar un buen caldo de pollo. Sólo tenemos que meter los ingredientes cortados y lavados en la olla rápida, y esperar.

¿Qué ingredientes necesito para preparar  un buen caldo de pollo?

  • 700 gr. de pollo (lo que se tenga)
  • 1 pimiento rojo grande
  • 1 tomate
  • 1 cebolla
  • 2 zanahorias
  • 2 dientes de ajo
  • Aceite de oliva
  • Agua
  • Sal
Cortamos y lavamos el tomate, el pimiento y las zanahorias. También cortaremos por la mitad una cebolla pelada y  machacaremos los dientes de ajo, y lo reservaremos todo con el resto. Prepararemos también el pollo.

De las partes del pollo, mejor usar muslos, pechuga, cuartos traseros, o lo que deseemos.

En una olla echaremos unos 3 litros de aguay pondremos el fuego al máximo. Cuando el agua empiece a hervir, echaremos primero el pollo, luego la verdura, y por último la sal.

Importante: Antes de cerrar, esperaremos unos 8 ó 10 minutos hasta que el caldo empiece a espumar. La espuma del caldo de pollo la retiraremos con una cuchara, y una vez que esté limpio el cazo, añadiremos un buen chorro de aceite de oliva y pondremos la tapa de la olla.

Necestiamos más o menos una hora y media para que nuestro caldo esté listo. Podemos dejarlo un poco más dejando enfriar un poco para volver a calentar. Cuanto más tiempo lo dejemos mejor.

Una vez hecho, hay que colar el caldo, y añadir si se quiere las zanahorias cortadas en rodajitas y unas tiras de pollo desmenuzado. El resto del pollo podemos guardarlo.

Esto es estupendo para hacer nuestra propia sopa o utilizar el caldo como salsa o para preparar arroz caldoso, el risotto, guisos, cremas, etc.

Preparando seitán en nuestra cocina

Hoy vamos a elaborar seitán, tal como están los precios de la carne y teniendo en cuenta que ya no podemos fiarnos de lo que comemos, tenemos la oportunidad de probar un alimento muy completo que sirve de perfecto sustituto de la carne. El seitán  ofrece muchas posibilidades a la hora de cocinarlo. Se puede preparar en guisos con patatas, a la plancha en rodajas, guisado en distintas salsas… Su textura y apariencia le convierten en uno de los sustitutos de la carne en la cocina más apreciado. Una vez obtenido el seitán, podemos conservarlo en la nevera con su agua de cocción, o bien, congelarlo.

Necesitamos:
Una bolsa de gluten de trigo (350g), 1/2 vaso de pan rallado, 1 vaso y 1/2 de agua, 3 pastillas de caldo vegetal, 1/2 taza de salsa de soja, 1 cebolla, 1 pimiento, 2 dientes de ajo y sal.

Elaboración:
Mezcla en un recipiente el gluten y el pan rallado con un poco de sal. Por otro lado pon a hervir el vaso y medio de agua para deshacer 2 de las 3 pastillas de caldo vegetal. Cuando estén disueltas, apaga el fuego y echa la salsa de soja. Deja enfriar todo hasta que esté templado y se pueda manejar con las manos.

Echa el agua a la mezcla de gluten y pan rallado. Amasa bien y en10 segundos estará hecha la bola de seitán. Previamente habrás puesto a hervir suficiente agua como para cubrir completamente la bola que has preparado. En este agua pon la bola, la cebolla y el pimiento troceados y la pastilla de caldo vegetal que nos queda.

En 30 o 40 minutos (según la consistencia deseada) estará listo. Saca del agua y deja en un colador para que repose un poco.